El queloide o cicatriz queloidea es una cicatrización exagerada por una fabricación excesiva de fibras de colágeno que forman algunas personas predispuestas y que va mas allá de herida o trauma. El factor hereditario es muy importante.
Sus principales características son: color rojo intenso, cicatriz sobreelevada en forma de cordón, picazón, dolor y aspecto antiestético. El color rojo intenso dado por el pigmento natural de la sangre (la hemoglobina) y por los miles de vasos que nutren esta formación exagerada de colágeno.
La luz Pulsada utiliza este color para lograr pasar de una cicatriz queloidea a una cicatriz más normal, en sesiones de corta duración. Es un coadyuvante dentro de los varios tratamientos que hay para la cicatriz queloide pero no es la solución definitiva para este problema.
LASER
El fundamento en el tratamiento láser de la cicatriz hipertrófica de tipo queloide, está dado por la hipervascularidad y neovascularización que se encuentra en su conformación. Estos factores persisten aún después de su resección quirúrgica. El láser para el tratamiento de queloides, actúa de dos maneras. La dermoabrasión superficial, elimina una porción hipertrófica de la cicatriz. En profundidad, restringe la circulación en los vasos que la nutren y estimula la producción de colágeno, disminuyendo la tensión. La termoanalgesia por frío es la indicada, y se puede complementar con anestésicos tópicos en gel o crema.